"La tierra es de quien la trabaja" Emiliano Zapata.

"Nosotros iremos hacia el sol de la libertad o hacia la muerte; y si morimos, nuestra causa seguirá viviendo. Otros nos seguirán" A.C Sandino.

viernes, 6 de mayo de 2011

¿Y si vamos al estadio?

Camisas, banderas, calcomanías y todos los artilugios que se puedan vender en la calle y los que puedan comprar los fanáticos se observan cuando se acerca un clásico del fútbol español, los famosísimos Real Madrid y Barcelona, antes de seguir leyendo (y yo escribiendo) dejo claro que no soy hincha de ninguno de los dos (esto es parte de la neutralidad), pero me llama la atención el fervor casi religioso con el que los jóvenes (y hasta los de tercera edad) esperan estas fechas.

Esta vez (en forma casi maratónica) se disputaron cuatro clásicos, pero esos detalles ya ustedes lo saben, estos eventos deportivos se han vuelto internacionales casi al estilo de los mundiales, y en Managua se vive esta fiebre como en cualquier ciudad de España (o al menos eso parece).

Desde que amanece hasta el final de los tiempos (21 de mayo de 2011) los hinchas no paran de hablar de los partidos, por Facebook, por Twitter, en las calles, en las universidades, en la parada de buses, en todos lados hablan sobre el Real Madrid y Barcelona, pero también no faltan los comentarios de personas que prefieren los clásicos nacionales, Real Estelí contra Diriangén.

¿Pero qué se necesita para que los partidos nacionales sean tan pomposos como el clásico español? desde mi humilde y nada experta opinión futbolera, considero que la inversión económica por parte de las organizaciones que se encargan de impulsar el desarrollo del deporte es primordial, pero qué va, los jugadores de primera división reciben poco dinero por jugar, además que no se dedican “full time” al entrenamiento, es más, lo toman como un trabajo de medio tiempo.

Con un fútbol de calidad y jugadores más “duchos” pienso que los jóvenes se verían atraídos y apoyarían más la liga nacional. Otro de los factores por el cual no se desarrolla este deporte, es la falta de espacio donde se pueda practicar.

Desde lo más profundo de mi corazón (hasta ya parece canción) espero poder ver ese mismo fervor y alegría cuando se realicen los partidos de los equipos nacionales, yo siempre le he ido al Real Estelí, tampoco soy el fan número uno de los norteños, pero ojalá y cuando juegue el Ferreti o el Xilotepelt también se instalen “estadios virtuales” privados y populares, para apoyar con toda esa alegría a esos chavalos que juegan con pasión, porque tenemos claro que no lo hacen por dinero como grandes figuras del fútbol internacional.

“Pero hombre” (como decía mi abuelo) tratemos de quitarnos ese malinchismo, está bien que les guste ver jugar a Cristiano Ronaldo y ver los magníficos goles de Messi o las atajadas celestiales de “San Iker”, pero aquí tenemos nuestros propios heroes como Samuel Wilson o el conocido Denis “El Pulpo” Espinoza, así que es hora de apoyar nuestro fútbol.

Esta es sólo mi opinión (alguien que ve de largo los toros), ya los expertos en fútbol dirán si la liga y selección nacional mejorará, si los ejecutivos se decidirán o no a invertir más dinero, si el gobierno construirá o no más estadios, o si los hinchas del Barcelona y el Real Madrid en Nicaragua deciden apoyar también el fútbol nacional.